Imagínate que un usuario entró en la página web de tu negocio y que analizó, foto por foto, todos los productos que ofreces. Incluso puede que hubiese añadido un par de ellos a la cesta de la compra, pero nunca llegó a finalizar el proceso. Existen ciertas herramientas que te permiten volver a conectar con estos clientes potenciales para así, incentivarlos a realizar la compra que nunca llegaron a realizar o hacer algún tipo de interacción beneficiosa para la visiblidad de tu marca. Esto es lo que se llama remarketing o retargeting y en este post te explicamos en qué consiste.
Originalmente llamado retargeting y rebautizado por el servicio de Google Ads como remarketing, hace referencia a una estrategia de marketing digital que puede ser útil para tu negocio. Esta herramienta te permite volver a impactar en usuarios que ya han interactuado con tu página web, tus redes sociales o incluso tu correo electrónico, a través de la publicidad. Al igual que con una valla publicitaria en una carretera muy transitada, con esta herramienta puedes colocar anuncios para que los usuarios te vean cuando naveguen por la red o visiten sitios web asociados. Con ello, podrás cumplir dos objetivos: aumentar el conocimiento de tu marca y recordar a los consumidores que realicen una compra o acción que tiempo atrás casi realizaron.
Asimismo, la publicidad que, en general son mensajes personalizados en función de los productos o servicios que los clientes hayan consultado, se puede colocar en tres grandes plataformas. En primer lugar, en páginas web, a través de la funcionalidad que ofrece Google Ads, como anuncios dinámicos, de texto, en vídeo o por lista de distribución, entre otros. En redes sociales como Facebook e Instagram, mediante el servicio Facebook Ads, que nos da la opción de dirigir nuestros anuncios a quienes ya hayan interactuado con nuestro negocio. Y, por último, el email marketing, con mensajes personalizados a personas que, por ejemplo, hayan dejado una compra sin finalizar. Por otro lado, existen otros buscadores como Bing y otras redes sociales como Linkedin o Twitter que permiten hacer anuncios de retargeting, pero no son los canales predilectos para “reconectar” con nuestros clientes.
Bien sea para darse a conocer o para aumentar las ventas o beneficios, el remarketing es una herramienta con algunas ventajas claras:
- Alcance y orientación. Te permitirá mostrarte ante personas que ya interactuaron contigo en el momento en el que estén realizando una búsqueda en Google, lo que aumentará tu oportunidad de darte a conocer.
- Posibilidad de segmentación. Una de las grandes ventajas del remarketing es que puedes crear listas para casos o comportamientos específicos. Podrás crear, por ejemplo, una lista para personas que clicaron en determinado producto o que añadieron elementos al carrito de compra, pero que no llegaron a finalizar el proceso.
- ROI muy alto. El ROI no es otra cosa que el retorno de la inversión, es decir, es un indicador de cuánto beneficio hemos obtenido por cada euro invertido en publicidad. Con el remarketing, este indicador suele ser muy alto ya que las campañas se dirigen a una audiencia, en principio, limitada pero muy interesada en nosotros.
Como ya te habrás imaginado, el remarketing funciona con las famosas cookies, que no son otra cosa que pequeños archivos, creados por un sitio web que se envían y almacenan en el navegador, y que registran datos sobre el comportamiento del usuario en ese navegador.
En resumen, si quieres encontrarte de nuevo con esos usuarios que mostraron interés por ti, por tus productos y por tu negocio, el remarketing es tu estrategia que necesitas para retomar contacto con tus clientes potenciales.