A lo largo de toda nuestras vidas hemos visto el signo “#” en nuestros teléfonos fijos o móviles. Sin embargo, fue en el año 2007 cuando la mítica almohadilla comenzó a conocerse y ganar fama bajo el anglicismo hashtag. Las redes sociales no solo cambiaron su nombre, sino también su popularidad y función. ¡Te lo contamos todo hoy, 23 de agosto, en el Día Internacional de Hashtag!
Como cabría esperar, la historia del hashtag dio su impulso en Twitter. Sin embargo, en el año 1993, ya nos encontramos los primeros indicios de su uso. Concretamente en el chat IRC, uno de los primeros espacios digitales que permitían hablar en tiempo real con usuarios de cualquier parte del mundo. Para aquel entonces se utilizaban determinadas etiquetas para abrir canales de comunicación con gustos, intereses, aficiones o lugares en común. Por ejemplo, #Madrid, #Canadá, #cocina, #mascotas y un largo etcétera.
Habría que esperar hasta agosto de 2007 para que Chris Messina, usuario del chat IRC y por aquel entonces trabajador de Google, propusiese en un tuit el uso del “#” en esta red social con la finalidad de agrupar conversaciones y temáticas. Para ver la popularización de este, habría que esperar hasta octubre del mismo año, cuando se produjo un incendio en California y los tuiteros decidieron reunir y ordenar todos los tuits en referencia al desastre bajo la etiqueta #sandiegofires.
Dos años después, ante el aumento imparable de su utilización, Twitter le dio cabida oficialmente. Por el contrario, no fue hasta un año más tarde, en 2010, cuando también aterrizó en Instagram y los usuarios comenzaron a organizar sus fotos y contenido con ellos. Fue en ese momento en el que Twitter se dio cuenta de su grandísimo potencial y nacieron también los famosos TT o Trending Topics.
Pero, ¿por qué se hicieron tan populares? ¿Qué beneficios trae para el usuario convencional o para un negocio? ¡Muy sencillo! A nosotros, como usuarios, nos facilita encontrar información o publicaciones relacionadas con un tema de nuestro interés, lo que nos ahorra tiempo y esfuerzo. Por otro lado, como empresas, nos ayudará a ser más visibles, aumentar nuestro alcance y presencia y nuestro público objetivo nos podrá encontrar más fácilmente.
Y, ¿qué tipo de etiquetas existen? Podemos beneficiarnos de cuatro tipos de hashtags. Se suele diferenciar entre el temático, que conecta directamente con el público objetivo de un tema (por ejemplo, #tartadequeso o #café); de eventos, para conocer los comentarios en tiempo real de un evento o fecha señalada (por ejemplo, #DíaInternacionalDelHashtag); trending topic, nos permite saber qué temas están en tendencia y podremos aprovecharnos del foco que hay puesto en ellos (por ejemplo, #Tokyo2020); y corporativos, que suelen ser pequeños eslóganes de empresas, como podría ser #PolloPollo de la marca de comida rápida, KFC.
Entonces, ¿cómo podemos utilizar los hashtags en nuestro beneficio? Podemos analizar las tendencias y participar en ellas a través de las etiquetas, así aumentaremos nuestra presencia. Por otro lado, no hay nada mejor que ir al grano: utiliza etiquetas específicas en lugar de utilizar muchas. Y, en relación a cuántos hashtags utilizar en nuestras publicaciones, dependerá de la red social en la que lo estemos utilizando. En general, se recomiendan entre una o dos etiquetas, aunque en Instagram se suelen utilizar algunas más.
En definitiva, puede que su inicio no estuviese exento de escépticos pero ahora es difícil imaginarse un mundo digital en el que no se utilice el hashtag para agrupar y encontrar temas o publicaciones de nuestro interés.