Quienes han recorrido esta mañana las calles de A Estrada desde primera hora se han detenido ante sus escaparates.Más que cualquier día. Más que en cualquier otro momento del año. Y no porque en estas cristaleras luciesen nuevos productos o los últimos servicios. Más bien, por todo lo contrario. Hoy, los escaparates de A Estrada esconden su interior.
Y lo hacen para llamar la atención sobre la necesidad de que, entre todos, cuidemos al pequeño comercio.
Impulsada por la Asociación de Comerciantes de A Estrada (ACOE), la iniciativa ha contado con el apoyo -en masa- de los distintos asociados. Las conversaciones se repetían en bares y cafeterías. Todo el mundo se preguntó lo mismo: ¿qué está pasando?
La respuesta es clara. Ante una coyuntura económica poco beneficiosa y en un contexto en el que el cliente opta, en numerosas ocasiones, por las grandes superficies para realizar sus compras, nuestros joyeros, panaderos, peluqueros, restauradores o dependientes alzan la voz: sin pequeño comercio no hay pueblo, sin pequeño comercio no hay vida.
Comunicación local en el ámbito digital
En esta circunstancias, debemos destacar además que la atención al cliente de proximidad ha encontrado una nueva fortaleza: las acciones de comunicación local en el ámbito digital, particularmente a través de llamadas a la acción instantáneas y promociones basadas en la cercanía con el cliente. Es, a través de estas tareas, cómo el pequeño comercio está ganando la batalla.
Una batalla a la que nos sumamos.